¡Creyentes! Si el abandono de sus hogares [en La Meca] fue sincero por Mi causa y para obtener Mi complacencia, no tomen por confidentes a quienes demuestran ser Mis enemigos, y enemigos suyos, revelándoles secretos [de Estado] como muestra de afecto hacia ellos; porque ellos han negado abiertamente la verdad revelada, han expulsado al Mensajero y los han expulsado a ustedes [de La Meca y de sus hogares], simplemente por haber creído en Dios, su Señor. ¿Cómo pueden confiarles secretos por afecto? Yo bien sé lo que ocultan y lo que manifiestan. Quien obre así se habrá extraviado del camino correcto.
Si ellos tuvieran dominio sobre ustedes, les mostrarían su verdadera enemistad maltratándolos física y verbalmente. Ellos querrían que ustedes dejaran de creer [en el Islam].
En nada los beneficiarán sus lazos familiares ni sus hijos, el Día de la Resurrección Dios juzgará entre ustedes. Dios sabe cuanto hacen.
Tienen un buen ejemplo en Abraham y sus seguidores, cuando dijeron a su pueblo: "Nosotros somos inocentes de ustedes y de cuanto adoran en lugar de Dios. Negamos que haya verdad en lo que ustedes creen, y comenzará la animadversión y el desacuerdo [en temas de creencia] hasta que no acepten que solamente Dios merece ser adorado". Pero no hagan como Abraham, cuando le dijo a su padre: "Pediré perdón por ti, pero no puedo hacer nada por ti ante Dios". [Abraham oraba diciendo:] "¡Oh, Señor nuestro! A Ti nos encomendamos, a Ti pedimos perdón y a Ti volveremos.
¡Señor nuestro! No permitas que los que se han negado a creer nos persigan, ni hagas de nosotros una causa por la cual se alejen [del Islam]. Perdónanos, ¡oh, Señor nuestro! Tú eres el Poderoso, el Sabio".
En ellos tienen un bello ejemplo quienes anhelan el encuentro con Dios y la recompensa el Día del Juicio. Pero quien se aparte, sepa que Él es el Opulento, el Loable.
Es posible que Dios haga surgir afecto mutuo entre ustedes y los que ahora son sus enemigos. Dios tiene poder para hacerlo, porque es Perdonador, Misericordioso.
Dios no les prohíbe hacer el bien y tratar con justicia a quienes no los han combatido por causa de la religión ni los han expulsado de sus hogares, porque Dios ama a los que actúan con justicia.
Dios solo les prohíbe que tomen por aliados a quienes los combaten a causa de la religión y los han expulsado de sus hogares o han contribuido a su expulsión. Sepan que quienes los tomen como aliados estarán cometiendo una injusticia.
¡Oh, creyentes! Cuando mujeres creyentes lleguen como emigrantes, comprueben su fe. Dios conoce su fe. Si corroboran que son creyentes, entonces no las devuelvan a los que se negaron a creer. Ellas no son lícitas para ellos ni ellos lo son para ellas. Devuelvan a sus exmaridos la dote que ellos les hayan dado, y sepan que no hay nada reprochable en que los creyentes se casen con ellas, siempre que les concedan la dote correspondiente. No deben ustedes, por su parte, retener a las mujeres que se niegan a creer, pero pueden exigir que se les devuelva lo que hayan dado como dote, como ellos también tienen derecho a exigirla. Esa es la ley de Dios que prescribió para ustedes. Dios es Sapiente, Sabio.
A aquellos cuyas esposas se hayan ido con los que se negaron a creer y los perjudiquen, denles una compensación acorde a lo que gastaron. Tengan temor de Dios, en Quien ustedes creen.
¡Oh, Profeta! Cuando las mujeres creyentes se presenten ante ti para prestarte juramento de fidelidad, comprometiéndose a no cometer idolatría, no robar, no cometer fornicación ni adulterio, no matar a sus hijos, no decir ninguna calumnia y a no desobedecerte, tómales el juramento de fidelidad y pide perdón a Dios por ellas. Dios es Absolvedor, Misericordioso.
¡Creyentes! No tomen por aliados a quienes han caído en la ira de Dios, pues habrán perdido toda esperanza en la recompensa de la otra vida, como ocurre también con los que niegan la resurrección de los muertos.