قُلْ إِنَّ صَلَاتِي وَنُسُكِي وَمَحْيَايَ وَمَمَاتِي لِلَّهِ رَبِّ الْعَالَمِينَ 162
Di: «Mi azalá, mis prácticas de piedad, mi vida y mi muerte pertenecen a Alá, Señor del universo.