وَقَالَ نِسْوَةٌ فِي الْمَدِينَةِ امْرَأَتُ الْعَزِيزِ تُرَاوِدُ فَتَاهَا عَنْ نَفْسِهِ ۖ قَدْ شَغَفَهَا حُبًّا ۖ إِنَّا لَنَرَاهَا فِي ضَلَالٍ مُبِينٍ 30
Pero algunas mujeres de la ciudad comentaron: "La mujer del gobernador pretende seducir a su joven criado. Su amor por él la ha trastornado. Pensamos que está profundamente equivocada".