Quien emigre por la causa de Dios encontrará en la Tierra muchos lugares para refugiarse y también sustento. A quien emigre de su hogar por la causa de Dios y la de Su Mensajero, pero lo sorprenda la muerte [antes de llegar a su destino], sepa que Dios le garantiza Su recompensa. Dios es Absolvedor, Misericordioso.