أَمْ نَجْعَلُ الَّذِينَ آمَنُوا وَعَمِلُوا الصَّالِحَاتِ كَالْمُفْسِدِينَ فِي الْأَرْضِ أَمْ نَجْعَلُ الْمُتَّقِينَ كَالْفُجَّارِ 28
¿Acaso sería propio de Mí considerar a los creyentes que obran rectamente igual que a los que siembran la corrupción en la Tierra, o considerar a los que tienen temor de Dios igual que a los inmorales?