وَإِذْ أَخَذَ اللَّهُ مِيثَاقَ الَّذِينَ أُوتُوا الْكِتَابَ لَتُبَيِّنُنَّهُ لِلنَّاسِ وَلَا تَكْتُمُونَهُ فَنَبَذُوهُ وَرَاءَ ظُهُورِهِمْ وَاشْتَرَوْا بِهِ ثَمَنًا قَلِيلًا ۖ فَبِئْسَ مَا يَشْتَرُونَ 187
Cuando Alá concertó un pacto con los que habían recibido la Escritura: «Tenéis que explicársela a los hombres, no se la ocultéis». Pero se la echaron a la espalda y la malvendieron. ¡Qué mal negocio...!