لَنْ يَنَالَ اللَّهَ لُحُومُهَا وَلَا دِمَاؤُهَا وَلَٰكِنْ يَنَالُهُ التَّقْوَىٰ مِنْكُمْ ۚ كَذَٰلِكَ سَخَّرَهَا لَكُمْ لِتُكَبِّرُوا اللَّهَ عَلَىٰ مَا هَدَاكُمْ ۗ وَبَشِّرِ الْمُحْسِنِينَ 37
Alá no presta atención a su carne ni a su sangre, sino a vuestro temor de Él. Así os los ha sujetado a vuestro servicio, para que ensalcéis a Alá por haberos dirigido. ¡Y anuncia la buena nueva a quienes hacen el bien!